viernes, 25 de mayo de 2007

El mercado del anime en Japón es desmesurado, tanto así que se tiene conocimiento de las series nuevas en un porcentaje que no sobrepasa el 50% en esta parte del mundo. La proliferación de series, directores, adaptaciones y tal vez por sobretodo la dimensión de sus temas le ha otorgado una gran, y al parecer inextinguible, oportunidad mercantil en todo el orbe. Para la habitual comunidad de otakus (entiéndase el término como aficionado no japonés a la subcultura popular nipona representada por series, películas, mangas, etc., ya que en Japón este término es usado de forma despectiva) un producto que rápidamente se ha introducido en las preferencias de los aficionados es el Dorama (Drama, o adaptación con actores reales). Considerado como el segundo filón comercial a explotar luego del anime dentro del circuito de las producciones para medios audiovisuales (recordemos que el manga, es tal vez el primero de forma global, pero bajo otros patrones de difusión y comunicación) son en su gran mayoría telenovelas, sin embargo existen adaptaciones de series famosas, o cuando alguna alcanza una gran popularidad precedente de la versión manga y genera gran expectativa, usualmente se realiza una adaptación en Live Action.

Sus presupuestos varían de acuerdo a la dimensión de la serie o al tipo de características previas que tenga el proyecto, ya sea para una serie de ficción o de romance, también, en el caso de adaptaciones de series muy complejas por su campo de acción escenarios o diseños (construcciones, diseño de criaturas, mechas, CG, etc.). En estas producciones encontramos por lo general rostros conocidos en el universo del pop japonés, ya que muchos son los J-idols que conforman el reparto de las producciones. Cantantes y modelos del momento son los intérpretes de la mayoría de las producciones dando a entrever una gran intención de aprovechar la popularidad de éstos para ganar una mayor audiencia, considerando el fenómeno comercial y el fanatismo que generan en la juventud japonesa, casi un referente de la sociedad contemporánea nipona. El horario de las producciones es diverso, pues las compañías que emiten estos doramas o series live action tienen tendencias como productoras.

Algunas de las emisoras producen temas de romance, históricos, policiales y adultos. Entre estas tenemos a:
Fuji TV , TBS , NTV, TV Asahi, NHK (Información extraída de http://es.wikipedia.org/wiki/Dorama”)

El término de Live Action, como el dorama, hace la misma referencia a que está encarnado por actores reales; series y/o películas con actores basadas en mangas o series animadas previas, este término es usado generalmente por los aficionados no japoneses, aunque en la actualidad las cosas han cambiado en la comunidad de aficionados nipones,
sobre todo con la gran cantidad de palabras anglosajonas introducidas en su japonés estándar (nihongo). Mangas shojo, shonen y de terror han sido llevados a la televisión. Además, se podría hacer una distinción de la definición en tres conceptos de acuerdo a su alcance, como: a) Adaptaciones de series o películas con actores reales, b)división de actores u objetos reales en producciones que integren animación y actuación “real” (3D, CGI, etc.), y c) en los juegos de Rol-Live Action con matiz interpretativo y teatral. No obstante, para nuestro mercado la creciente injerencia de este material japonés, realmente destacable y masiva, es a través de las películas de terror, bajo la primera definición, que es la más común en el resto del mundo. Es cierto que ya desde los noventa existía un creciente número de aficionados al anime y a los mangas (resultantes fueron una abrumadora cantidad de revistas informativas, clubes y proyecciones), pero hablamos de difusión masiva y aceptación del gran público, e incluso tal vez lo más representativo, como son los estrenos en salas limeñas de películas japonesas. Aun así, el dorama o live action aunque ya conocido por algunos tuvo su primera ventana en las telenovelas adquiridas por TNP, hoy TV Perú. El hecho curioso es que las novelas que emitía el canal del estado eran coreanas o chinas, asiáticas en fin, pero debido a que en antaño TNP haya comparado una cantidad considerable de programas a la empresa japonesa NHK (programas infantiles en su mayoría, aunque también algunos culturales) la nacionalidad real de las producciones pasaba desapercibida. También, los aficionados al cine encontraban un cierto medio de difusión de películas japonesas sobretodo por los ciclos de películas de director que se emitían, como las de Akira Kurosawa (Los siete samuráis), Takeshi Kitano (Sonatine), Shohei Imamura (La balada de Narayama), Nagisa Oshima (El imperio de los sentidos) y de Naomi Kawase (Sukazu, ganadora de la Cámara del Oro en Cannes en 1997).

Hoy en día el medio que ha puesto realmente más al alcance cualquier producción japonesa o no, es la Internet y los fansubs (aficionados que subtitulan series y ponen a disposición sus trabajos en la Red de forma gratuita con fines de difusión). Tal vez los más importantes en la materia o más conocidos por los internautas sean “Dorama no Fan Sub” (http://www.doramanofansub.es/), site español especializado en subtítulos de series live action y doramas, y “JDorama” (http://www.jdorama.com/). Por este medio se es capaz de encontrar series que no han sido licenciadas para otros países. Es cierto que aún se discuten sobre problemas como la legalidad, el respeto a los derechos de autor y demás infracciones ligadas a la propiedad intelectual, pero considerando la situación tanto económica como cultural de la región, el hablar de “problemas” se contrapone con la llamada realidad. En nuestro país donde la piratería es el más importante comercio casi como la piratería china, el anime, ya sea licenciado o de fansubs, de igual forma integra la lista de títulos de la piratería. Con un mercado nítidamente reconocible en zonas específicas y distritales (casi como Akihabara lo es en Tokio) es posible encontrar casi cualquier serie, película, OVA (también OAV – Original Animation for Video) y recientemente también mangas en formato digital (CD-ROM). Las series que se consiguen en nuestro mercado son versiones subtituladas de fansubs y comercializadas, las cuales atentan contra el principio mismo de los antes mencionados, sin embargo considerando la realidad de nuestro mercado, muchas personas no poseen ordenadores y no pueden acceder a estos productos, así que una forma de hacerse con las series que se desea ver es a través de estos discos. Obviamente muchos participamos de este círculo de la ilegalidad, pero resulta inevitable en un Estado donde la posibilidad o imposibilidades sobredimensionan a la población y la reprimen. Defender la piratería resulta complejo, y al hacerlo se cae en facilismo o la ciega condena. De cierto modo la venta de los discos de anime o dramas, si bien con fuerte demanda en Lima, oscilan entre precios de costo, así que se podría hablar incluso de una comercialización con fines de difusión al igual que los afisubs. De todos modos el tema es delicado y lo que delimitamos finalmente en esta introducción es que este es el principal medio de difusión de las series o películas live action en nuestro mercado, con un creciente y progresivo incremento de títulos actuales o no. Finalmente, conociendo a grandes rasgos ya el live action y su injerencia en nuestro mercado reseñaremos algunos títulos recientes.


(Imágenes - actores reales de live action) De arriba hacia abajo: "L" personaje del manga-anime Death Note, "Enma Ai y sus sirvientes" personajes del anime Jigoku Shoujo, y "Boogiepop Phantom" personaje del anime "BoogiepopPhantom".

No-muerto:
Daniel Guerra Caballero

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1 comentarios:

Mary Me. dijo...

Gracias por la información me ha sido de mucha utilidad y concuerdo contigo en muchos de los aspectos que mencionas.

Dulces recuerdos y pesadillas

Sakura